Tensión extrema en el corazón de Madrid. La marcha de jubilados frente al Congreso se tornó caótica esta tarde, con enfrentamientos entre manifestantes y fuerzas de seguridad que han dejado al menos cinco detenidos y varios heridos. La policía ha establecido un amplio dispositivo de seguridad, bloqueando el acceso a la plaza y generando un ambiente de incertidumbre.

Los manifestantes, que exigían mejoras en sus pensiones y condiciones de vida, se agruparon en la emblemática plaza del Congreso, donde la situación comenzó a escalar. Testigos informan que la policía, en un intento por controlar la multitud, ha realizado cargas y ha establecido cordones de seguridad, lo que ha provocado una respuesta airada de los asistentes. “La gente no se va a ir”, afirmaba uno de los manifestantes, mientras el ambiente se tornaba cada vez más tenso.

Los reporteros en el lugar han señalado la presencia masiva de agentes de la infantería y de unidades especiales, que parecen estar preparando acciones para desalojar a los manifestantes. “Están haciendo un corralito”, comentaba un periodista, mientras las fuerzas de seguridad intentaban dispersar a la multitud. La situación es volátil y se teme que los enfrentamientos puedan intensificarse.

A medida que la noche avanza, las autoridades han pedido calma, pero el descontento entre los jubilados es palpable. La marcha, que comenzó como una protesta pacífica, se ha convertido en un foco de tensión que podría tener repercusiones en la agenda política del país. Se espera que la situación continúe desarrollándose en las próximas horas, con más actualizaciones a medida que surjan nuevos detalles.