Un hombre armado con un pico desató el caos en la sede provincial de energía en San Jorge, Santa Fe, a las 10 de la mañana, dejando un rastro de destrucción a su paso. Sin previo aviso, ingresó a la oficina, donde comenzó a destrozar mobiliario, computadoras y vidrieras, mientras empleados y clientes, aterrorizados, intentaban escapar del violento ataque. Las escenas de pánico se vivieron en el lugar, donde gritos y el sonido del impacto del pico resonaron en el aire, generando un ambiente de horror.

Testigos afirman que el hombre, identificado posteriormente por la policía, parecía tener un conflicto previo con la empresa, lo que sugiere que este acto no fue un ataque al azar. Tras varios minutos de destrucción, el agresor se retiró del lugar, pero su fuga fue breve; horas más tarde, las autoridades lograron su detención. La fiscalía ya trabaja en la imputación por daños y amenazas, mientras se investiga el trasfondo de esta violenta reacción.

Afortunadamente, no se reportaron heridos, aunque la escena fue desgarradora. Empleadas que se encontraban en la oficina tuvieron que huir mientras el hombre arremetía con su pico. La situación ha dejado a la comunidad en estado de shock, ya que nadie esperaba un acto de tal violencia en un entorno laboral.

El fiscal Rodríguez Ibarros está al frente de la investigación, buscando esclarecer los motivos detrás de este ataque. La pregunta que muchos se hacen es: ¿qué llevó a este hombre a actuar de esta manera? Las respuestas aún son inciertas, pero la justicia ya se ha puesto en marcha para abordar este inquietante incidente. La comunidad de San Jorge, a 130 km de la capital, sigue recuperándose de este impacto repentino y aterrador.