**MOVILIZACIÓN EN EL CONGRESO: URGENCIA EN LA DISCAPACIDAD**
Una intensa movilización se desarrolla frente al Congreso de la Nación, donde familias y defensores de los derechos de las personas con discapacidad exigen atención inmediata ante una crisis que afecta a miles. Con pancartas en mano, los manifestantes claman por soluciones urgentes a la falta de recursos y apoyo que enfrentan diariamente.
La situación se torna crítica mientras la Policía Federal establece cordones de seguridad en la Plaza del Congreso, intentando controlar la creciente tensión. Las familias, que han llegado desde distintos puntos del país, expresan su desesperación por la falta de financiamiento adecuado para servicios esenciales como acompañantes terapéuticos, psicólogos y talleres de apoyo. “No podemos seguir así, el costo de la atención es insostenible”, afirma Silvia, una madre que lucha por el bienestar de su hija con discapacidad.
El operativo policial ha cambiado a medida que avanza la jornada, y los organizadores de la marcha han acordado no interrumpir el tránsito, aunque el clima se siente cada vez más cargado. “La gente no entiende lo que significa vivir con una persona con discapacidad. La angustia es constante”, continúa Silvia, quien comparte su lucha diaria para conseguir atención adecuada para su hija.
La desesperación es palpable entre los manifestantes, quienes exigen al gobierno que escuche sus reclamos y actúe de inmediato. “No podemos esperar más. Necesitamos que se reconozca la gravedad de esta situación”, dicen, mientras la multitud crece en número y en determinación.
La crisis en la atención a la discapacidad no puede ser ignorada. Las voces de quienes sufren en silencio exigen ser escuchadas. La movilización frente al Congreso es un llamado urgente a la acción. Las familias no se irán hasta que sus demandas sean atendidas. La presión está en aumento, y el tiempo se agota.